Borek turco

En pleno mes de agosto nada mejor que adentrarnos por el Mediterráneo y conocer una de las pasiones turcas que nos ofrece Turquía: El Borek.

Si tuviera que describir un Borek turco diría que son innumerables capas de pasta filo envolviendo unas tiernas espinacas y un original queso feta junto a una suave carne picada. Como ves es una mezcla de sabores y texturas que bien merece la pena conocer y adentrarnos así en el arte culinario de Turquía que tantos manjares nos ofrece y tan completos, porque una de las costumbres de la gastronomía turca es precisamente la mezcla de ingredientes equilibrados que nos ayudan a elaborar el plato perfecto de hidratos, proteínas y verduras.

Por ello no es casualidad que en sus platos encontremos carnes acompañadas de  arroz y decorados con una gran variedad de verduras.
Berenjenas, cordero, cilantro, queso feta… son algunos de los ingredientes que caracterizan a Turquía y que poco a poco en este blog iremos descubriendo al igual que otras especialidades de diferentes partes del mundo…es hora de probar cosas nuevas!

Ingredientes:

  • un paquete de pasta filo
  • 300 grs de carne picada de pavo y pollo
  • 300 grs de espinacas frescas
  • 100 grs de queso feta
  • 50 grs de aceite de oliva
  • 1 diente de ajo
  • 1 huevo
  • semillas de sésamo para decorar
  • sal fina

Preparación con la Thermomix:

Comenzamos nuestra receta rallando el queso feta en la Thermomix programando 5 segundos en velocidad 5. Reservamos.

Sin lavar el vaso metemos  el aceite y programamos 3 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1. Añadimos el ajo pelado y entero y programamos 2 minutos más a la misma velocidad y temperatura.

 Finalizado el tiempo retiramos el ajo y ponemos la mariposa en las cuchillas para añadir ahora la carne picada a la que ya le hemos añadido muy poquita sal.

Rehogamos todo bien durante unos 15 minutos con  temperatura Varoma y velocidad 1, colocando el recipiente Varoma encima con las espinacas bien limpias dentro.

Cuando terminen los 15 minutos, añadimos las espinacas en el interior del vaso y programamos 1 minuto sin temperatura y con velocidad 2. Dejar templar.

Una vez listo el relleno, vamos a preparar el montaje del borek, que si bien no es complicado, sí es necesario tener un poco de maña y mucha paciencia.

Precalentamos el horno a 180º.

Extendemos tres láminas de pasta filo sobre una lámina de papel de horno, ya que ésta nos ayudará a moverlo después a la bandeja del horno y evitar que se nos rompa.

Sobre estas primeras tres láminas de pasta, a las que por cierto hay que tratar con mucha delicadeza porque se parten fácilmente, colocaremos parte del queso feta que hemos rallado antes, repartiéndolo bien por toda la lámina y teniendo en cuenta que los bordes deben quedar libres.

Colocamos encima otras tres láminas de pasta filo y ahora repartimos la mitad de la carne y las espinacas. Volvemos a tapar con otras tres láminas de pasta filo y repetimos la secuencia de queso feta, pasta filo y carne con espinacas.

Una vez terminadas las capas, doblamos los laterales hacia adentro para que no se salga el relleno y vamos enrollando como si se tratara de un brazo gitano.

Ahora cogeremos otras tres láminas de pasta y envolvemos el brazo de gitano como si se tratara de un paquete de regalo, para así tapar los laterales y evitar que el relleno se nos salga por los lados.

Finalmente sólo tenemos que pincelar la superficie con huevo batido y decorar con las semillas de sésamo.

Horneamos durante unos 15 minutos aproximadamente a 180 grados hasta que obtenga un bonito color dorado y ésta será la indicación de que ya tenemos listo nuestro exquisito Borek turco.

Para preparar esta receta sin Thermomix tendremos que picar el queso feta en una picadora, rehogar la carne picada en un caldero o sartén grande y cocinar las espinacas al vapor o cocidad en agua y sal.

El resto del procedimiento es igual que con Thermomix.

El Borek se suele elaborar con carne de cordero, pero yo la elaboré con una mezcla de pavo y pollo.

Albóndigas de Tofu en salsa de albaricoque

El tofu es por excelencia la carne de los vegetarianos, ya que su alto contenido en proteínas lo hacen perfecto para ser el sustituto de la carne animal.
Para su elaboración, similar a la del queso de leche de vaca, se separa el suero de la leche de soja  y la parte sólida resultante dará lugar a un alimento muy bajo en calorías, con muy poca grasa, digestivo  y rico en calcio, hierro y magnesio.

Su sabor y textura tan suaves hacen que por sí solo resulte hasta insípido, pero mezclándolo con los ingredientes adecuados obtendremos un alimento muy saludable y que nos aporta proteína vegetal de alto valor nutritivo.
En la mesa lo podemos presentar en dados en medio de una ensalada,  a la plancha con ajojil por encima, salteado con verduras asadas, flotando en una sopa reconfortante o con una salsa deliciosa de albaricoques y en forma de albóndigas como os traigo hoy.
Que la disfrutéis!

Ingredientes para las albóndigas:

  • 75 grs de cebolla
  • 130 grs de  zanahorias
  • 25 ml de aceite de oliva
  • 250 grs de tofu fresco
  • 2 cucharadas de salsa de soja
  • 2 cucharaditas de semillas de sésamo
  • 2 cucharadas de harina de trigo integral
  • Aceite para freir las albóndigas
  • 1/2 cucharadita de sal

Ingredientes para la salsa:

  • 50 g de zanahorias
  • 40 g de papas
  • 20 ml de aceite de oliva
  • 75 g de orejones de albaricoque
  • 150 ml de leche
  • 1/2 cucharadita de sal

Preparación con Thermomix:

Lo primero que tenemos que hacer para elaborar la salsa de albaricoque es hidratar los orejones. Para ello los dejaremos en un bol de agua caliente durante al menos 2 horas para que empapen bien y que nos quede una salsa fina y con la textura adecuada.

A continuación escurriremos bien el tofu y lo envolvemos con papel de cocina para eliminar la mayor cantidad de líquido.

Una vez hecho estos dos pasos nos ponemos ya a elaborar las albóndigas.

Introducimos en el vaso la cebolla y las zanahorias (peladas y cortadas en trozos) y añadiremos también los 25 ml de aceite. Trituramos durante 6 segundos a velocidad 5.

Bajamos los restos de las paredes y las rehogamos durante 10 min, a 100º, velocidad 2.

Finalizados los 10 minutos añadimos el tofu bien escurrido en trozos, el sésamo, la salsa de soja y la sal y programamos 5 minutos, 80º y  velocidad 2   retirando el cubilete para que el tofu termine de evaporar agua.

Cuando finalize sacamos la mezcla con una lengua de cocina y la extendemos en un plato llano hasta que enfríe y la podamos trabajar con las manos.

Ahora es el momento de llamar a los pequeños de la casa y hacer manualidades con ellos, jejeje, así que nos pondremos guantes de silicona para evitar que se nos pegue la masa (a los más peques con engrasarles las manitas con aceite de oliva ya tenemos).

Formamos bolitas del tamaño de unas albóndigas, las pasamos por la harina y les damos toquecitos para que suelten el sobrante de harina. Las vamos apartando en un plato limpio mientras calentamos abundante aceite caliente (y cuando digo abundante me refiero a que queden totalmente sumergidas las albóndigas, así evitaremos moverlas para darles la vuelta y que se nos rompan).

También es importante que las vayamos friendo en varias tandas, es decir, ir friendo en pocas cantidades, así conseguiremos que la temperatura del aceite no baje y no se rompan las albóndigas.

Las freímos hasta que doren y las apartamos en un plato con papel de cocina. Reservamos y nos vamos con la salsa!

Para la salsa:

Introducimos en el vaso las zanahorias y la papa en trozos. Trituramos durante 5 segundos, velocidad 5.

Bajamos los restos de las paredes, añadimos en aceite y cocinamos durante 10 minutos, 100º, velocidad 2.

Añadimos los orejones ya hidratados, la sal y la leche. Trituramos durante 1 minuto a velocidad progresiva 7-10.

 

Si queremos una salsa más fina, dejar otro minuto a velocidad 10.

Para mi gusto, la textura de la salsa con estas cantidades es la perfecta, pero si os gusta más líquida podéis añadirle un chorrito de leche y rectificar de sal si fuera necesario.

Ya sólo nos queda hacer un basmati y acompañar a estas sanas y suaves albóndigas que seguro sorprenderán a todos en casa.

Preparación sin Thermomix:

Lo primero que tenemos que hacer para elaborar la salsa de albaricoque es hidratar los orejones. Para ello los dejaremos en un bol de agua caliente durante al menos 2 horas para que empapen bien y que nos quede una salsa fina y con la textura adecuada.

A continuación escurriremos bien el tofu y lo envolvemos con papel de cocina para eliminar la mayor cantidad de líquido.

Una vez hecho estos dos pasos nos ponemos ya a elaborar las albóndigas.

Picamos en una picadora la cebolla y las zanahorias (peladas y cortadas en trozos) y sofreímos en una sartén con los 25 ml de aceite. Rehogar hasta que la cebolla esté transparente y la zanahoria cocinada.

Ahora troceamos el tofu en dados pequeños y lo añadimos a la sartén. También agregamos el sésamo, la salsa de soja y la sal y lo cocinamos todo a fuego medio durante unos 5 minutos aproximadamente.

Pasamos a un bol y trituramos con una batidora de brazo hasta conseguir una mezcla homogénea. Dejamos enfriar hasta que la podamos manipular con las manos.

Ahora es el momento de llamar a los pequeños de la casa y hacer manualidades con ellos, jejeje, así que nos pondremos guantes de silicona para evitar que se nos pegue la masa (a los más peques con engrasarles las manitas con aceite de oliva ya tenemos).

Formamos bolitas del tamaño de unas albóndigas, las pasamos por la harina y les damos toquecitos para que suelten el sobrante de harina. Las vamos apartando en un plato limpio mientras calentamos abundante aceite caliente (y cuando digo abundante me refiero a que queden totalmente sumergidas las albóndigas, así evitaremos moverlas para darles la vuelta y que se nos rompan).
También es importante que las vayamos friendo en varias tandas, es decir, ir friendo en pocas cantidades, así conseguiremos que la temperatura del aceite no baje y no se rompan las albóndigas.

Las freímos hasta que doren y las apartamos en un plato con papel de cocina. Reservamos y nos vamos con la salsa!

Para la salsa:

Picamos en una picadora las zanahorias y la papa y las rehogamos en una sartén con el aceite durante unos 10 minutos a fuego medio. Una vez rehogadas las zanahorias y la papa, lo pasaremos a un bol donde añadimos los orejones escurridos, la sal y la leche para triturar bien la salsa con un brazo batidor.

Para mi gusto, la textura de la salsa con estas cantidades es la perfecta, pero si os gusta más líquida podéis añadirle un chorrito de leche y rectificar de sal si fuera necesario.

Ya sólo nos queda hacer un basmati y acompañar a estas sanas y suaves albóndigas que seguro sorprenderán a todos en casa.

 

 

Galletas integrales de aceite de oliva y sésamo

galletas integrales de oliva y sésamo

Qué ricas, fáciles y sanas son estas galletas.  Se hacen en un momento, sin cortapastas, sin pistolas de galletas… con nuestras propias manos! como si hiciéramos albóndigas y luego las aplanáramos con las manos, así de sencillo.
La mayoría de las galletas se elaboran con mantequilla y ya sabemos que no es nada bueno este lácteo si lo que pretendemos en bajar de peso o simplemente mantenernos sanos y libres de enfermedades como el colesterol.
Por esta razón escogí de entre muchas recetas de galletas la que hoy os muestro, por sus sanos ingredientes y por su simplicidad a la hora de hacerlas.
La receta original sólo lleva sésamo para decorar, pero yo hice algunas con coco rallado, otras con almendras picadas… podéis hacerlas como más os guste, esta es otra de las ventajas de hacer nuestras propias galletas!

– Ingredientes:

  • 200 grs de harina integral de trigo
  • 100 ml de aceite de oliva suave
  • 1 huevo
  • 100 grs de azúcar moreno
  • 1/2 sobre de levadura química en polvo
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla líquida
  • una pizca de sal
  • semillas de sésamo, coco rallado, almendras en cubitos o lo que más os guste

– Preparación:

Para hacer estas riquísimas galletas lo primero que tenemos que hacer es batir el azúcar, el aceite de oliva y la esencia de vainilla con la thermomix o con una batidora de mano. A continuación añadimos el huevo y seguimos batiendo.

Cuando esté la mezcla hecha vamos añadiendo poco a poco la harina integral, la levadura y la pizca de sal. Si usamos la thermomix la programaremos unos 2 minutos a velocidad 3 y si es manual, mezclaremos con ayuda de una cuchara grande hasta que ya no podamos seguir con la cuchara y tengamos que usar las manos para terminar de unificar la masa. En este caso recomiendo usar unos guantes de vinilo o látex para evitar que la masa se nos pegue en las manos.

Llegados a este punto vamos a formar pelotitas con las manos, como si hiciéramos unas albóndigas pequeñas, y prepararemos varios platitos con los ingredientes de decoración que más nos guste (en este caso yo he usado sésamo, coco rallado y almendras). Una vez formadas las bolitas, las vamos a presionar en los platitos de frutos secos que hemos preparado y redondearemos los bordes con el dedo meñique para que queden con una forma bonita.

Ya sólo nos queda ponerlas en la bandeja del horno (precalentado a 180 grados) con algo de separación y encima de papel de horno antiadherente.

Hornearemos durante 10-15 minutos aproximadamente (dependiendo de nuestro horno, el mío calienta mucho y en 10 minutos ya las tenía listas).

Dejamos enfriar en una rejilla y ya me contaréis si no están más ricas que las galletas integrales que venden en los supermercados.

Premio Liebster Award

liebsterblog-award

Siempre que tenemos un proyecto en mente y lo ponemos en marcha, es ya un gran logro y satisfacción personal ver como cada día que pasa se convierte en algo indispensable en nuestra vida, pero cuando transcurre el tiempo y compruebas que lo que te gusta hacer también le gusta a otros, la satisfacción es doble. Premios como éste me animan a seguir con esta pequeña ventana a mi cocina y ayudaros a comer cada día un poquito más sano.

En primer lugar quiero agradecer a Cristian, autor del blog   Arandabuesa, por haberme concedido este premio.

Y en segundo lugar quiero explicar que el «Premio Liebster Award» es un premio que se concede a los blogs que tienen menos de 200 seguidores, para así darles un pequeño empujoncito a estos blogs,  que no por tener pocos seguidores carecen de calidad, sino de difusión.

Este premio tiene una serie de pautas, vamos a conocerlas:

1. Nombrar y agradecer el premio a la persona/blog que te lo concedió
2. Responder a las 11 preguntas que te formule
3. Enumerar 11 cosas sobre ti para que podamos conocernos un poco mejor
4. Conceder el premio a  blogs que te gusten, que estén empezando y que tengan menos de 200 seguidores.
5. Formular 11 preguntas para que respondan las bloggers a las que premias
6. Visitar los blogs que han sido premiados junto con el tuyo
7. Informar a los blogs de su premio
Así que allá voy con las preguntas:
1.¿Porque decidistes el nombre de tu blog?
Porque mi pasión por las masas y por lo original de ellas, es decir, la harina integral, define mi elección en la cocina por lo genuíno, por los ingredientes sanos y naturales que no han sido refinados y despojados de su esencia original.
2.¿En algún momento has pensado en dejar de escribirlo?
Nunca he pensado en dejar nada que me guste hacer, al menos mientras pueda.
3.¿Que te gustaría conseguir con el blog?
Que las personas que quieran llevar una dieta sana y equilibrada encuentren una solución factible en mis recetas.
4.¿Cual es esa prenda que no puede faltar en tu maleta?
Una camiseta de tirantes de algodón para dormir.
5.¿Que prefieres la ropa de invierno o la ropa de verano?
Las dos. La primera por su elegancia, la segunda por su colorido y comodidad.
6.¿Un complemento preferido?
Un colgante que me regaló mi marido cuando nació mi hijo.
7.¿Como calificarías tu estilo de vestir?
Casual
8.¿Cual es la ciudad favorita que te gustaría conocer?
Brujas, en Bélgica, por la magia que transmiten sus fotografías.
9.¿De que grupo o cantante tenías pósters en tu habitación?
Alejandro Sanz
10.Cine ¿con o sin palomitas?
Sin palomitas, pero con bizcocho integral, jeje
11.¿Que es lo que más te gusta de mi blog?
La naturalidad con la que muestras tus recetas favoritas.
Sobre las once características de mi persona diría…
– mi pasión por mi hijo
– mi pasión por los animales
– mi pasión por la cocina
– valorar las cosas más sencillas de la vida
– la sinceridad
– las ganas de aprender algo nuevo cada día
– mi afición por la decoración
– mi afición por la nutrición
– mi afición por el cuidado en general de la salud
– la empatía hacia los demás
– la superación personal.
Concedo este premio a los siguientes blogs:

Crema de lechuga

crema de lechuga

Cada vez que compraba lechuga para hacer una ensalada terminaba tirando la restante por que se me estropeaba en la nevera, así que me puse a buscarle otras utilidades culinarias al alimento en cuestión hasta que descubrí varias recetas que ahora tendrán más protagonismo en mi cocina que la de la simple ensalada de lechuga y tomate.

Algunas personas me dicen que la lechuga le producen gases en el estómago, pero he de decirles que las verduras crudas son más indigestas que las cocinadas y por ello pueden originar flatulencias, así que otra opción más digestiva es comerlas cocinadas, al menos la lechuga en este caso.

Su suave sabor es muy agradable a nuestro paladar y aunque nos recuerde a la reina de las ensaladas, seguro que les gustará hasta a aquellos que sacan la lechuga de las hamburguesas por temor a su crujiente degustación.

Os propongo algo… haced esta crema y no digáis de qué está hecha hasta que no la prueben los comensales… pocos acertarán la respuesta.

Es muy recomendable tomar lechuga en la cena, ya que nos induce al sueño y contiene muy pocas calorías.

Además de aportarnos vitaminas como la B9, que es idónea para mujeres embarazadas, también nos protege frente a enfermedades degenerativas como puede ser el cáncer, ya que sus antioxidantes y beta-carotenos están directamente relacionados con su llamativo color verde y son los encargados de fortalecer nuestro organismo.

También son conocidas sus propiedades antitusivas, diuréticas y digestivas e incluso ayudan a calmar los fuertes cólicos de la menstruación.

Seguro que por alguna de las propiedades que he nombrado te interesará pintar de verde tus platos.

Conozcamos por fin la fórmula de esta crema tan original y sorprendentemente agradable.

Ingredientes:

  • 120 grs de cebolla
  • 150 grs de puerro
  • 250 grs de lechuga
  • 100 grs de papas
  • 1 cucharadita de ajojil
  • 2 hojas de hierbabuena
  • 250 grs de agua
  • 250 grs de leche desnatada
  • 1 cucharadita de sal fina yodada
  • 30 grs de aceite de oliva virgen extra

Preparación con la Thermomix:

Introducimos en el vaso la cebolla, los puerros, el ajojil, las papas y el aceite de oliva virgen. Trituramos 5 segundos, velocidad 5.

Rehogamos durante 5 minutos con temperatura Varoma y en velocidad 1.

Añadimos el agua, la sal y las hojas de  hierbabuena. Cocinamos durante 15 minutos, con temperatura de  100º y velocidad 2, quitando el  cubilete y poniendo el cestillo para que no salpique.

Añadimos la lechuga en trozos y la leche. Trituramos 5 segundos, velocidad 5.

Cocemos durante 12 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1. Sin cubilete también y con el cestillo.

Dejamos que se enfríe un poco y trituramos durante 30 segundos, a velocidad progresiva 5-7-10.

Ya me diréis si os gusta el resultado. Buen provecho!!!

Preparación sin Thermomix:

Picamos la cebolla, los puerros y las papas y lo rehogamos  con el ajojil  y el aceite de oliva virgen durante 5 minutos aproximadamente a fuego medio en un caldero.

Añadimos el agua, la sal y las hojas de  hierbabuena. Cocinamos durante 15 minutos a fuego medio-algo y después añadimos la lechuga en trozos muy pequeños y la leche. 

Cocemos durante 12 minutos a fuego medio-alto y dejamos que se enfríe un poco. Finalmente trituramos en un baso batidor o con una batidora de mano.

Quinoa real

La quinoa es considerada como un superalimento, ya que contiene todos los aminoácidos esenciales que la convierten en auténtica proteína. Aunque tenga apariencia de cereal, ya que nos recuerda al arroz integral o al cous cous, estos granitos pertenecen a la misma familia de las espinacas, es decir, son semillas de una planta.

Hidratos de carbono, proteínas de alto valor biológico , grasas insaturadas, minerales y vitaminas…. todas sus increíbles propiedades lo han convertido en uno de los candidatos para alimentar a los tripulantes del espacio, ya que la NASA lo utiliza para sus viajes espaciales de larga duración.
Otra de las ventajas de la quinoa es que además de aportarnos fibra, no  contiene gluten, por lo que pueden tomarlo las personas que tienen celiaquía o intolerancia al gluten.

Cuenta con una  larga conservación, ya que contiene saponina que protege el grano del ataque de parásitos o insectos  y que sólo desaparece al lavarse con abundante agua. Este dato es muy importante, ya que debemos lavarla  muy bien , porque de lo contrario resultarían indigestas.

Su presentación es amplia: en grano, mueslis, copos, harinas… todas ellas nos aportan lo necesario para que un ser humano sobreviva sólo con agua y quinoa.

Pero…¿cómo se preparan estas semillas?¿qué sabor tienen? ¿dónde podemos adquirirlas?

Son preguntas que seguro te estarás haciendo y yo ahora te las voy a aclarar:

La quinoa se prepara igual que el arroz  y se puede preparar como si realmente lo fuera: solo, con verduras, con legumbres, en ensaladas… también en postres  y como cereales para el desayuno. Su suave sabor es muy agradable, como también lo es su textura.

Y si queremos sacarle todo el sabor a sus semillitas, después de lavarlas bien y escurrirlas, vamos a tostarlas en una sartén con un poco de aceite. De esta manera conseguiremos un característico sabor a nuez que harán las delicias de los más escépticos.

Se vende en grandes superficies y en herbolarios. No nos limitemos a comer siempre arroz… hay otras alternativas y con muchas más propiedades. Los vegetarianos son adictos a estas semillas, ya que es una buena solución  que les aporta  proteína de alto valor biológico.

Creo que te he convencido de la riqueza de este alimento… o mejor dicho, de este «superalimento».

Probadla y comprobaréis una vez más que merece la pena ampliar nuestros horizontes culinarios.

Albóndigas de pollo y pavo al vapor

Es increíble lo buenas que pueden estar unas albóndigas siendo de pavo y pollo y sin freírlas.

La verdad es que no tienen nada que envidiarle a las clásicas albóndigas de carne roja, son muy jugosas, sanas, se hacen de una manera muy fácil con la Thermomix y las podemos comer como acompañamiento de arroces, pastas e incluso de verduras.

Como salen muchas unidades con estos ingredientes, yo suelo hacer con la misma carne unas hamburguesas, que a la plancha os aseguro que también están muy buenas. También las podríamos congelar.

 

Ingredientes para la carne de albóndigas:

  • 600 grs de carne picada mezcla de pollo y pavo (la picamos en la thermomix)
  • 15 grs de leche desnatada
  • 1 huevo
  • 30 grs de cebolla
  • 1 cucharadita de aceite de ajojil
  • 1 cucharadita de sal fina yodada
  • 1 pizca de pimienta blanca molida

Ingredientes para la salsa de verduras:

  • 100 grs de cebolla
  • 1 cucharadita de aceite de ajojil
  • 180 grs de pimiento rojo
  • 90 grs de pimiento verde italiano
  • 60 grs de puerro
  • 30 grs de aceite extra de oliva
  • 180 grs de tomate natural triturado
  • 120 grs de vino blanco
  • 1 hoja de laurel
  • 100 grs de agua
  • 1 cucharadita de sal fina yodada
  • 1 cucharadita de pimentón dulce molido

Preparación con la Thermomix:
En primer lugar vamos a preparar las albóndigas, para ello introducimos en el vaso el aceite de ajojil y la cebolla (los 30 grs). Programamos 5 segundos en velocidad 5. Bajamos los restos hacia las cuchillas y añadimos la sal, la pimienta, el huevo y la leche mezclándolo 4 segundos en velocidad 4.

Metemos este aliño en un bol grande y nos ponemos unos guantes de látex para mezclarlo bien junto con la carne picada y hacer a continuación las formas de las albóndigas. Una vez formadas, las dispondremos en el recipiente varoma. Tapamos y reservamos.

Ahora vamos a preparar la salsa que acompañará a estas estupendas y sanas albóndigas:

Cortamos en trozos la cebolla y la metemos en el vaso, junto con el ajojil, los pimientos y el puerro, también cortados en trozos regulares. Programamos 4 segundos en velocidad 4.

Añadimos el aceite y sofreímos 10 minutos en temperatura Varoma y velocidad cuchara.
Agregamos ahora el tomate y la hoja de laurel, programando 5 minutos con temperatura Varoma y velocidad cuchara.
Quitamos la hoja de laurel y añadimos el vino blanco, el agua, la sal y el pimentón. Colocamos el recipiente Varoma en su posición y programamos 25 minutos, temperatura Varoma y velocidad 2.
Cuando finalice el tiempo, sólo nos queda pasar las albóndigas a un wok o caldero. Trituramos la salsa 30 segundos en velocidad 8 y luego cubrimos las albóndigas con ella.

Para que los sabores se integren vamos a darle un hervor a las albóndigas en el wok y ya estarán listas para degustar.

 

Fuente: La juani de Ana Sevilla (adaptación)

Arroz con atún

El arroz es uno de los cereales que más importancia tiene a nivel mundial. Se puede preparar de mil maneras: arroz amarillo , paella, arroz a la cubana, con verduras, con pescado, con carne… incluso en postres queda buenísimo: arroz con leche.
Es muy importante aportar una ración de hidratos de carbono todos los días en nuestro almuerzo, nos dará la energía que necesitamos para continuar la jornada.
También es importante elegir bien el tipo de arroz, siendo los más aconsejables el arroz integral, el arroz vaporizado y el arroz basmati. Estos tres arroces mantienen todas sus propiedades, algo que no podríamos decir de todos los arroces que encontramos en los supermercados.

Si a los hidratos le unimos la proteína y las buenas grasas del atún, éste será el resultado:

Ingredientes:

  • 50 grs de aceite de oliva
  • 1 cucharadita de ajojil
  • 80 grs de pimiento rojo
  • 80 grs de pimiento verde
  • 250 grs de arroz vaporizado o basmati
  • 40 grs de vino blanco
  • 3 latas pequeñas de atún en aceite de oliva
  • 600 grs de agua caliente
  • 1 cucharadita de sal fina yodada

Preparación con la Thermomix:

Ponemos en el vaso la cucharadita de aceite de ajojil y los pimientos cortados en trozos. Trituramos 5 segundos en velocidad 4. Con la espátula bajamos los restos que hayan quedado en las paredes y en la tapa del vaso y agregamos el aceite. A continuación  programamos 5 minutos, temperatura varoma y velocidad 1.

Colocamos la mariposa en las cuchillas, añadimos el arroz y programamos 2 minutos, temperatura varoma, giro a la izquierda y velocidad cuchara.

Incorporamos el agua, la sal  y el vino y programamos 11 minutos, temperatura varoma, giro a la izquierda y velocidad cuchara.   Si queremos el arroz más hecho lo dejamos cocinar unos minutos más a la misma temperatura.

Pasamos el arroz a una fuente y le agregamos el atún no escurrido del todo. Mezclamos bien y lo podemos servir con un poquito de parmesano rallado.

Dejamos reposar un poco el arroz y lo servimos.

¿A que es muy fácil y muy rápido de hacer?

Para hacer esta receta sin Thermomix tendremos que picar los pimientos y pocharlos con el aceite de oliva y el ajojil a fuego medio durante 5 minutos. Después añadir el arroz, rehogar 2 minutos y después añadir el agua, la sal y el vino. Dejar cocinar a fuego medio-alto durante 11 minutos.  Comprobar que el arroz está cocinado, si no es así dejarlo unos minutos más.

Pasamos el arroz a una fuente y le agregamos el atún no escurrido del todo. Mezclamos bien y lo podemos servir con un poquito de parmesano rallado.

Dejamos reposar un poco el arroz y lo servimos.

Fuente: Recetas Thermomix.

Flan de cacao al Varoma

¿Te apetece comer un flan sano, casero y buenísimo pero no tienes ganas de encender el horno y estar cociéndolo al baño maría y toda la dificultad que ello conlleva? Pues sigue leyendo, porque hoy os traigo un flan de cacao puro y sin tener que hornearlo. Las ventajas son muchas: un gran ahorro en la factura de la luz, tu horno limpio como una patena y la satisfacción de comerte un flan casero mucho más bueno que los que venden en los supermercados… y si lo endulzas con sirope de ágave, pues mucho mejor!  lo convertiremos en un flan light para así no sentirnos culpables de tan dulce manjar.

La receta original se elabora con el doble de ingredientes que yo he puesto, pero no es que  tuviera mi despensa vacía… es que lo he hecho a posta para no tener un flan tentador en mi nevera que me dure toda la semana… por eso lo hago «mini» y así entre mi marido y yo nos dura sólo el fin de semana. Es una buena táctica para poder darnos nuestros caprichitos sin pasarnos con las cantidades  y no tener que  renunciar al placer de comer un postre al menos una vez a la semana.

Ingredientes:

  • 250 grs de leche desnatada
  • 2 huevos medianos
  • 65 grs de azúcar o su equivalencia en edulzante natural (sirope de ágave, stevia…)
  • 2 cucharadas rasas de cacao puro
  • 700 grs de agua

Preparación con la Thermomix:

Poner en el vaso la leche, los huevos y el azúcar y mezclar durante 10 segundos en velocidad 7.

Poner en el fondo del molde (que ha de tener una capacidad de medio litro) un poco de sirope de chocolate y verter la mezcla con cuidado. Tapar con papel de aluminio y encima poner unas tres servilletas de cocina, para que empapen la humedad del varoma. Reservar.

Enjuagar el vaso de la Thermomix y llenarlo con 700 grs de agua, colocarlo en la base, taparlo sin cubilete y poner el molde con el flan dentro del varoma. Colocarlo en su posición y programar 40 minutos en temperatura Varoma y velocidad 2.

Cuando finalice el tiempo comprobar que el flan está cuajado introduciendo en el centro un pincho de brocheta, si sale limpio estará cuajado, si no es así programar unos minutos más a la misma temperatura.

Dejar enfriar en la nevera y ya tenemos un postre riquísimo, con mucho calcio y proteínas y que no puede ser más fácil de preparar.

Fuente: Libro Imprescindible para su cocina Thermomix 31 (adaptación).

Coca integral de calabaza

Hoy nos vamos a Valencia para degustar uno de sus bizcochos típicos en Semana Santa y Pascua: la coca de calabaza.
La receta original es con harina refinada, pero haciendo alarde al nombre de nuestro blog, y porque sabéis que me encanta comer sano, la he elaborado con harina integral.

El resultado es un coca suave, esponjosa y muy saciante. Basta con una pequeña porción para quedarnos satisfechas…y esto es realmente ventajoso!

Si no hay manera de que tu hijo se tome el puré de calabaza ya tienes la solución! te aseguro que nunca adivinará cuál es el principal ingrediente de esta coca… y si no haz la prueba.

Ingredientes:

  • 600 grs de calabaza pelada
  • 350 grs de azúcar
  • 4 huevos
  • 260 grs de aceite de girasol
  • 400 grs de harina integral de trigo
  • 2 sobre de gasificantes (2 sobres blancos y 2 sobre azules o morados)
  • 1 sobre de levadura química en polvo
  • canela molida para espolvorear

Preparación con la Thermomix:

Trocear la calabaza en daditos y meterla en un bol apto para microondas. Lo tapamos (puede servir las tapas que vienen especiales para microondas) y programamos 15 minutos, a 900 w.Si con este tiempo no está cocida, bien porque estén los trozos muy grandes o porque la potencia de nuestro microondas sea inferior, lo dejamos cocinar unos minutos más.  Escurrimos bien y dejamos que enfríe.

Precalentamos el horno a 180º. Forramos con papel vegetal un molde rectangular grande (de 35 x 24 cm aproximadamente).

En el vaso introducimos la  calabaza asada, el azúcar, los huevos y el aceite de girasol. Programamos 1 minuto, a velocidad 6.

Agregamos la harina, los sobres de gasificantes y la levadura. Mezclamos durante 20 segundos, a velocidad 6. Removemos la mezcla con una espátula para terminar de mezclar bien.

Vertemos la mezcla en el molde previamente engrasado o protegido con el papel de horno y espolvoreamos bien con  canela molida por encima.

Horneamos durante 40-45 minutos, a 180º.

Sacamos, esperamos a que temple, demoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Para hacer la coca sin Thermomix cocinar igualmente en el microondas la calabaza y luego la trituramos bien junto con el azúcar, los huevos y el aceite de girasol. Añadimos la harina, los gasificantes y la levadura y mezclamos bien con una varilla manual hasta que la mezcla esté integrada. Verter en el molde engrasado  y espolvorear con la canela. Finalmente horneamos 40-45 minutos a 180 grados.

 

Fuente: Mis Thermorecetas